En este
artículo Paco Espadas se plantea una serie de dudas acerca de una frase que
dijo el pedagogo francés Philipe Meirieu: No podemos contentarnos con dar de
beber al que tiene sed, sino que hay que dar sed a quienes no quieren beber.
Las
cuestiones fueron las siguientes: ¿La enseñanza origina el aprendizaje?
¿Aprender es un deber o un derecho?
La respuesta
a la primera de ellas fue que toda enseñanza causa aprendizaje ya que todos
nosotros hemos aprendido algo a pesar de que tuviéramos malos maestros y
conservamos cosas de quienes a pesar de no ser los mejores nos marcaron por
algo en especial. Por lo que todos los que estimulan la curiosidad del alumno
lo están enseñando a que pueda aprender. En muchos casos por mas que se empeñe
el docente en conseguir un aprendizaje en sus alumnos este no llega de forma
eficaz y puede deberse a varios factores, uno de ellos puede ser la metodología
tradicional del maestro que no llama la atención del alumnado puesto que les hace
permanecer pasivos mientras explica, por lo que debe plantearse cambiar la
forma de dar las clases para conseguir motivar a sus alumnos y que tengan esas
ganas de aprender cosa que se está consiguiendo cambiar en los centros actuales.
Otro de los problemas que se puede plantear es que los alumnos no han sido
enseñados para saber captar y retener la información, esto hace que muchos de
ellos no sean capaces de aprender lo que se les está intentando explicar.
También hay que tener en cuenta la distribución del aula y del horario que debe
estar organizada para conseguir la mayor eficacia por parte del alumnado como
del profesorado.
La respuesta
a la segunda pregunta fue que todos deben de poder participar en la vida de su
comunidad. Se trata tanto de un deber como de un derecho, es un derecho para
los niños el poder acudir a clase todos los días para así formarse para un
futuro y es un deber por parte de los padres que tiene que ser complementado
por la comunidad educativa para educar de forma constante, progresiva y que
consiga alcanzar los objetivos para poder vivir en sociedad.
Por lo que
ambas preguntas tienen relación al tratarse de que si el deber de enseñar por
parte de los padres y los profesores y el derecho de los niños de acudir a
clase se llevan a cabo de forma en que se consiga que los alumnos tengan esa
sed para beber, no tendrá que estar tan encima de ellos y serán los alumnos los
que necesitaran saciar su curiosidad con lo que el maestro les tiene que
enseñar completando así el aprendizaje.
Leídas todas las entradas, Alejandro. Tenía retraso contigo, pero ya estamos a la par.
ResponderEliminarBuen trabajo. Buenos resúmenes y comentarios personales con argumentos suficientes.
No obstante, yo creo que Paco Espadas concluye que la enseñanza NO causa el aprendizaje. No estoy seguro de que hayas entendido tú lo mismo que él dice...
Enhorabuena.